TARTA DE REQUESÓN CON LEMON CURD

Receta de el 3, Sep, 2022

Ingredientes

  • 1/2 receta de bizcochos de soletilla
  • 180 g de requesón
  • 200 g de nata para montar
  • 5-6 cucharadas de azúcar avainillada
  • 5 g de gelatina, en polvo o láminas
  • 1 receta de curd de limón opción salsa
  • 75 g de azúcar y 115 ml de agua para el almíbar

Una tarta estupenda para celebrar un cumpleaños o cualquier otra fiesta. Además, cuando hay mucha prisa o no se quiere montar todo el trabajo de hacer los bizcochos, preparar el curd y todo eso, basta con batir el requesón y la nata con el azúcar avainillado y hacer el almíbar para empapar los bizcochos, que se compran hechos en la pastelería y el lemon curd industrial en el supermercado. ¿Quién da más?

 

Preparar los bizcochos de soletilla y, si se quiere, extender la masa sobre la bandeja del horno guarnecida con una silicona o un papel de horno a 1 dedo de grosor, lo que facilita el trabajo. Preparar el lemon curd con las cantidades indicadas para salsa, pero añadir un poco más de mantequilla –como 30 g más–, porque, como se observa en las imágenes, me quedó un poco demasiado «salsa» y escurría un poco. Preparar el almíbar para embeber los bizcochos hirviendo las cantidades indicadas 5 minutos, con azúcar avainillada o con 1/2 vaina de vainilla. Dejar enfriar todo.

Montar el aro de montaje regulable de 10 cm de altura a un diámetro de 18-20 cm sobre la bandeja definitiva de la tarta. Rellenar el fondo con un círculo de bizcocho recortado a ese diámetro –o con bizcochos de soletilla ajustados y recortados lo necesario para cumplir el mismo fin, formar la base de la tarta, empaparlos con un poco de almíbar ya frío, extender una capa de lemon curd por encima e introducir en el frigorífico.

Poner la gelatina a remojo en agua muy fría durante unos 5-6 minutos y luego dejarla en un colador para que escurra el exceso de agua.

Batir el requesón con la mitad del azúcar y dejar en frío en espera. Montar la nata siguiendo las instrucciones del enlace –muy fría, en un recipiente frío, con las varillas muy frías y el azúcar también, pero añadir al final la gelatina, como se indica en el enlace–. Mezclar ambos batidos de inmediato para montar la tarta.

Verter la mitad del batido sobre el aro de montaje con la base de bizcochos y lemon curd. Colocar otro círculo de bizcocho o desmenuzar el resto de los de soletilla y esparcirlos sobre el aro con la nata. Humedecerlos un poco con el almíbar. Repartir otra capa de lemon curd y cubrir con el resto del batido requesón nata. Extender una capa de lemon curd encima del batido y dejar en frío unas horas para que adquiera cuerpo.

En el momento de servir, pasar un cuchillito por el borde y retirar el aro después de haberlo abierto a un diámetro superior.

 

CONSEJOS: Los bizcocho de soletilla comprados se pueden sustituir por mostachones o tortas de Alcázar, también exquisitos. El lemon curd casero se puede sustituir por el comprado en cualquier supermercado un poco grande o en establecimientos de productos británicos. Es un poco más espeso y de amarillo menos intenso porque contiene más mantequilla, pero también es delicioso. El trabajo se reduce mucho.

Esta tarta se puede hacer también con mermeladas, siempre que sean de frutas más bien ácidas que dejen esa sensación de dulce-ácido de la crema de limón, como las grosellas o las frambuesas. Tampoco está nada mal con jalea de membrillo por encima –quizá con gelatina para espesar–, con su color cobrizo tan suntuoso, y un poco de carne de membrillo en el centro, entre las dos capas. El membrillo va más que bien con el requesón y los quesos en general.

 

 

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