RÖSTI

El rösti, uno de los platos nacionales suizos, también se hace en otros cantones con patatas cocidas con piel, peladas y ralladas. Este elaborado con patatas crudas es de Basilea. En los casos en los que se haga con patatas cocidas, freír antes la cebolla, en menos tiempo. Las patatas más acecuadas para el rösti son Bintje, Palma, Desirée o Kennebec, que son las gallegas. Cuando se quiere hacer un rösti de patatas crudas más grande, más grueso, hay que aumentar el tiempo de cocción por ambas caras y disminuir en proporción la potencia del fuego.
Pese a que se toma con el café de media mañana en Suiza, ahora muchas veces y siempre hasta hace 30 años, es también una guarnición estupenda para carnes calientes, sobre todo rojas o de mucho sabor.

Pelar las patatas y lavarlas. Rallarlas finas (hay unos ralladores específicos pero puede valer uno semigrueso o un robot casero). Mezclarlas con la cebolla, la sal, el comino y la pimienta y colocarlas en una sartén de fondo grueso (de hierro fundido o cobre) donde estará la mantequilla blandita pero no fundida ni mucho menos frita, o el aceite.
Ponerla sobre el fuego suave y mover un poco para repartir la grasa. Apelmazar el conjunto con la espátula como para hacer una tortilla y taparlo para que se vaya haciendo despacito y tostándose por abajo. Al cabo de 15-20 min. darle la vuelta con un plato y devolverlo a la sartén para que se haga por el otro lado otros 5-10 min.